Ají de Gallina

Ingredientes (4 personas):

1 pechuga de pollo o gallina entera

1 hoja de laurel

1 cajita de nata para cocinar o 1 una taza de leche evaporada

1 cebolla

1 ajo

1 rebanada de pan (remojada en un poco de caldo o agua y escurrida)

3 tazas de caldo de pollo

1 zanahoria

1 cucharada de nueces picadas (o en su defecto nuez moscada)

1 poco de queso parmesano rallado

4 patatas cocidas y cortadas en rodajas

2 huevos cocidos para adornar

1 sobre de crema de ají amarillo (si no lo puede conseguir y tiene el ají amarillo natural debe hervirlo tres veces cambiándole el agua para quitar el picor)

Aceite, sal, pimienta,

Preparación:

Hervir la pechuga del pollo en agua con una hoja de laurel, la zanahoria y sal (si se desea puede agregarle otros vegetales al caldo, como puerros, cebolla, apio, etc. para hacerlo más sabroso)

Cuando el pollo esté hecho dejar que enfríe y apartar el pollo para deshilacharlo.

En una cazuela aparte, añadir un poco de aceite y pochar la cebolla y el ajo, la pulpa del ají amarillo ( si hace esta receta con el ají amarillo natural) o añadir la crema de ají amarillo luego de que la cebolla esté casi transparente y remover por unos segundos sin dejar que se seque.

Añadir el pan remojado y escurrido y apartarlo a otro recipiente pasarlo por el chino o triturarlo, junto con un poco de caldo y la zanahoria que ha hervido en el caldo (esto le dará un hermoso color y bue sabor a nuestro plato), devolverlo a la cazuela para seguir con la cocción a fuego lento, pasados unos minutos agregarlas las pechugas deshilachadas, las nueces (o la nuez moscada) y un poco de queso parmesano rallado.

Al final agregar la nata o la leche evaporada y remover unos minutos a fuego bajo sin dejar que hierva.

Servir sobre las patatas cocidas y decorar con la mitad del huevo cocido, una aceituna y arroz blanco.

Personalmente prefiero  servirlo acompañado de arroz y obviar las patatas, porque esta deliciosa salsa se funde de manera exquisita con el arroz. Pero la receta tradicional es acompañado de ambos, por lo que lo dejo a vuestra elección, de cualquiera de las formas, no os arrepentiréis de haber preparado esta deliciosa receta peruana.